A falta de esa confirmación oficial que arroje la autopsia, y cuyos resultados se conocerán en breve, la documentación encontrada en la ropa del cadáver y una primera identificación visual inicial por parte de la
Policía Judicial de la Guardia Civil personada en el lugar del hallazgo, hace
"indicar" que se trata de este hombre de 36 años, que fue visto por última vez en su vivienda el pasado viernes.
El subdelegado ha asegurado además que el cuerpo
"en principio no presenta signos de violencia" pero se está a la espera de confirmar a través de la
correspondiente autopsia si se trata de una "muerte criminosa".
Aquilino Iniesta,
(en la foto superior), ha confirmado también que la
Policía Nacional se ha puesto en contacto con la familia de
Jairo "para que acudan al auxilio de la identificación". En un primer momento, se pensó que la desaparición de
Jairo guardaba relación con un juicio al que tenía que presentarse el pasado martes en
Albacete por tráfico de drogas, por lo que no se descarta que pudiera tratarse de una muerte violenta.
El
Delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, (en la foto), ha rechazado pronunciarse sobre las hipótesis que se barajan en la muerte del colombiano de 36 años
Jairo Roland Arcos, cuyo cadáver fue encontrado anoche en el
Júcar, pero si ha confirmado que
"no hay signos de violencia".
A preguntas de los periodistas,
Gregorio se ha remitido a la autopsia que
"se está realizando" al cadáver para poder ofrecer más datos, pero sí ha avanzado que "superficialmente, no hay signos de violencia".
"Ahora, la autopsia que se le está practicando dirá la causa exacta" de su muerte, ha comentado
Gregorio, quien no ha descartado ninguna hipótesis:
"Puede tratarse de cualquier cosa, cabe también la posibilidad de que sea un suicido, pero todo está pendiente de la autopsia", ha reiterado.