Según informa en nota de prensa el instituto armado, efectivos del equipo de Investigación de la Guardia Civil de Tobarra tuvieron conocimiento, a través del Cuerpo Nacional de Policía de Hellín, dentro del intercambio de información y colaboraciones que se llevan a cabo entre ambos cuerpos policiales, de la venta de varias piezas de oro en un establecimiento de compra y venta de esta localidad que levantaba sospechas, por si pudieran estar relacionadas con algún ilícito penal cometido en demarcación de la Benemérita.
A partir de esta información, los agentes del equipo de Investigación de la Guardia Civil comenzaron a investigar la posible procedencia de estas piezas de oro, y dadas sus características y las inscripciones que parecían grabadas en ellas, se contactó con unos vecinos de Tobarra, que tras su examen las reconocieron como de su propiedad, presentando seguidamente la denuncia al desconocer su sustracción.
Tras la recuperación de las joyas y de su entrega a sus legítimos propietarios, la Guardia Civil localizó y detuvo a las personas que habían efectuado su venta, como presuntos autores de un delito de hurto.
Según pudo conocer la Guardia Civil, la sustracción se produjo cuando los autores fueron invitados a la vivienda donde se encontraban las joyas, desplazándose a la mañana siguiente a la localidad de Hellín para realizar su venta.
Las diligencias instruidas por la Guardia Civil sobre los hechos investigados fueron puestas, junto con la persona detenida, mayor de edad, a disposición del Juzgado de Instrucción de Hellín, en funciones de guardia.
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